Alternativa de futuro

En Artcycled, nos gusta destacar y dar voz a todas las iniciativas que aparezcan basadas en la mejora del medio ambiente. Preferiblemente, apoyamos aquellas que no tienen tantos medios para su difusión y por ello nos consideramos un altavoz complementario en la suma por el bien común.

Pese a que las grandes corporaciones tienen muchos más recursos que los que puedan tener pequeñas asociaciones o empresas y no necesitan que hablemos de ellas, si lo hacemos en esta ocasión, es porqué, queramos o no, si ellas se suman al carro de la sostenibilidad y del cuidado del medio (aunque inicialmente pueda ser solo una nueva campaña de Greenwaching),  el resultado final es bueno para todos, y sobre todo para el planeta. Como suele decirse….”por algo se empieza…”

En cierto modo, confirma que la tendencia la marca el consumidor y no el mercado y que, si cada vez más grandes corporaciones implementan productos, recursos o soluciones responsables con el medio esperemos que en breve también lo hagan con la producción socialmente ética), por algo será….

Hace pocos días nos sorprendió la noticia de que Coca Cola empezará pronto a comercializar botellas de papel en lugar del clásico envase de plástico. Parece que los prototipos van en buen camino y probablemente a partir de verano esta nueva botella será una realidad.

Sin duda puede ser un primer paso para un cambio de modelo que supondría una reducción drástica de los residuos en envases para bebidas, siendo este uno de los tipos más recogidos en las playas.

Para lograrlo se usará una tecnología desarrollada con madera de origen sostenible para crear una funda de papel con un fino revestimiento de plástico PET que pueda ser reciclado al 100% como si fuera papel. Este nuevo material permite contener líquidos, CO2 y oxígeno con un gran rendimiento y durabilidad para proteger su contenido.

La idea será producir las primeras 2.000 botellas con la bebida vegetal AdeZ (de la propia compañía Coca-Cola). El objetivo de la marca con el embalaje sostenible es recolectar o reciclar una botella o lata por cada una vendida en 2030. Sin duda un propósito ambicioso pero del que muchas marcas deberían tomar buena nota.